Monumento al Calderaio

En la pequeña Piazzetta della Citadinanza Attiva, se levanta este monumento en homenaje a quienes integraban uno de los gremios más prósperos de hace 500 años. El elevado precio de los cacharros en general y los calderos en particular, hacía que la gente continuamente vivíera reparando sus artefactos de cobre cuando se perforaban o rajaban. El calderero (calderaio en italiano), era una artesano muy solicitado. Lo que no significaba que fuera apreciado. Sus jornadas de 14 horas diarias de labor, y el ruido del constante golpeteo con los martillos contra el metal, hacían que ningún vecino los quisiera tener cerca. El progreso y la industrialización , acabaron con esta antiquísima profesión.

Un dovuto riconoscimento a chi per una vita si è occupato di aiutare altri riparando oggetti allora indispensabili per la vita di tutti i giorni. La statua realizzata in bronzo dorato fa bella mostra di se campeggiando al centro della piazza. Visibile a tutti nell'arco delle 24 ore.